En esta época de pandemia, donde tenemos que acomodarnos a los cambios que esto nos provoca, surge en nosotros la incertidumbre que nos enfrenta con la falta de seguridad, de confianza o de certezas.
Cuando todo esto ocurre, aparecen nuevas realidades que tenemos que afrontar y entonces, ¿qué nos pasa con el control?
Dichas nuevas realidades escapan a nuestro control y no se ajustan a nuestras expectativas.
¿Podemos rescatar algo positivo de esto?
Al aceptar que la incertidumbre es parte de nuestra vida, nos podemos abrir a las nuevas experiencias, salir de nuestra zona de confort, tomar las oportunidades que se nos presentan y así estimular nuestra creatividad.
La incertidumbre debe ser entendida como una motivación humana.
¡Abrámonos al cambio y quizás nos sorprendamos de todo lo que podemos lograr!